LA MAGIA VERDE, LAS PLANTAS Y LA HERBOLARIA

La magia verde se halla estrechamente ligada con el entorno más o menos esotérico que rodea a la fitoterapia y el herbalismo, muy populares como forma de medicina alternativa. En ciertos casos, se han establecido dudas sobre la legalidad de algunas prácticas de magia verde que pudieran incorporar elementos psicoactivos de origen natural.

Introducirse en el mundo de las hierbas es como penetrar en un jardín cuyos encantos aun están por descubrir.

Pero …¿Que es una hierba?

Aunque todas las hierbas son plantas, no todas las plantas son hierbas.

Por supuesto, nos estamos refiriendo a las hierbas útiles, ya sea por su valor nutritivo, como condimento, o como agente medicinal terapéutico.

 La Utilización de las plantas en el mundo mágico se divide:

Baños/Lavados (Destacando los baños de descarga de origen floral).

Inciensos (Entre los que destacan los de varilla y principalmente los katares, o copal, como los llamaron los antiguos amerindios).Ya los druidas sabían que su extracto puro podía tanto curar como matar, razón por la que las mantenían secretamente guardadas.

Rituales con Hierbas

Pociones y Elixires

Desde tiempos remotos se usa la fitoterapia o uso de hierbas y plantas con fines mágicos y curativos. Y esto ha ocurrido en diferentes zonas del mundo, sin discriminar una parte u otra, ya que en cualquier país la curiosidad por este tipo de sanación y el deseo de hacer efectivas las cualidades de las plantas han hecho que los conocimientos sobre ellas hayan traspasado fronteras. Pero, curiosamente, según la zona, estos conocimientos pueden variar.

A la atribución de dotes singulares en estas plantas se le conoce como Magia Verde.

Desde que los primeros seres humanos identificaron posiblemente por el olfato-los sutiles poderes que se encerraban en las plantas, atribuirían sus virtudes a algo invisible y sutil que las habitaba: al mundo de los espíritus y a la magia, entendida ésta no como un acto de fé, sino como un esfuerzo en el que se unen de la mente consciente y el poder inconsciente para lograr una concentración de fuerza y energía dirigidas a la consecución de un objetivo. La mayoría de los herbarios se empezaron a escribir en la antigua Grecia, y en ellos se entremezclaban sus usos medicinales con sus aplicaciones rituales o mágicas. Esos libros fueron copiados y recopilados durante siglos, esparciendo aún más las tradiciones de la magia herbal.

Las hierbas, las flores y los árboles son la materia prima de las medicinas que curan nuestro cuerpo, su belleza y sutiles influencias siempre han sido mágicas. En los antiguos jardines de las casas de campo se plantaban flores y plantas, no sólo por su apariencia sino por sus propiedades ocultas.

Desde sus comienzos, el hombre ha dedicado un especial culto al mundo vegetal, puesto que de él dependía su supervivencia.

Muchas plantas fueron divinizadas, como el trigo, símbolo de la diosa griega Ceres, o el mirto, planta sagrada de los muertos, mientras en algunas ceremonias eran empleados vegetales con propiedades especiales (hachís, opio, peyote, coca) para alterar el estado de consciencia del mago, aumentar la potencia y facilitar el desdoblamiento del cuerpo astral.

*Los poderes de las plantas van mucho más allá de sus propiedades químicas y farmacológicas estudiadas por la herboristería*. La planta ante todo es carga de magnetismo terrestre, y no era por casualidad que los antiguos mantuviesen que los bosques estaban poblados por Elfos y Duendes, personalizaciones de la fuerza mágica de las hierbas.

Por otra parte, la planta recibe el influjo de la Luna y de los astros.

Cuando las recolectemos, lo haremos con respeto recitando esta breve fórmula, cuyo fin es el de «compensar» el desequilibrio provocado a la Tierra al extirparle el fruto:

*«Planta (nombre de la planta), te tomo de la madre tierra para que ejercites para mí tu mágica virtud con este objeto (explicar detalladamente el efecto que se desea obtener).»*

Una planta no necesita ser rara para ser mágica.

Algunas de las más comunes malezas tienen nombres fascinantes, por ejemplo, las cabezas de las pequeñas flores amarillas llamadas Gold of Pleasure (Carmelina Sativa), un nombre que al instante evoca las praderas iluminadas por el sol. Nombres como la bergamota y el romero nos traen a la mente la antigua botica, con sus jarras, popurrís, pomas y los venerables herbarios, proporcionan una increíble variedad de nombres de hierbas autóctonas, muchos de los cuales contienen las claves de sus propiedades mágicas.

Como pueden ver, *las plantas tienen también un poder medicinal.*

Una planta medicinal es un ser vivo sumamente complejo e imposible de reproducir, ni siquiera parcialmente, en un laboratorio. Aunque su principio vital parece sumamente sencillo, con la fotosíntesis que transforma el dióxido de carbono y el agua en azúcares, por medio de la energía solar, los procesos metabólicos que se crean posteriormente hacen difícil cualquier análisis sobre su ciclo natural.

Hasta ahora se han aislado en su interior más de 12.000 principios orgánicos, algunos de ellos empleados posteriormente por la medicina química para la elaboración de los medicamentos. Esto, que en principio parece sensato, se ha demostrado como un tremendo error científico, puesto que al extraer una sola sustancia activa desequilibramos el conjunto. Las plantas medicinales, no lo olvidemos, son un producto extraordinario para la salud de la Humanidad cuando las empleamos en su totalidad, perfectamente equilibradas en sus componentes.

Esta enorme complejidad es la que las proporciona sus grandes virtudes: eficacia e inocuidad, y cuando aislamos uno de sus componentes las desequilibramos.

Hay una tremenda arrogancia en hacer caso omiso de la sabiduría de nuestros antepasados, quienes aseguraban que lo que había aprendido del mundo no se lo debían a la capacidad de sus mentes de funcionar como computadoras analíticas y orgánicas, sino a la capacidad de sus corazones como órganos de percepción.

Ahora si nosotros queremos ser unos herbolarios buenos, y muy buenos, es muy importante no solamente conocer las plantas, sino que primero debemos conocer nuestro cuerpo y conocerlo de varias formas:

La parte física,

La parte de funcionamiento,

La parte emocional,

La parte que se ve afectado cada órganos por las diversas emociones que podemos tener.